Rotorua
Qué ciudad tan distinta es Rotorua 🌋
Primero tengo que aclarar algo: hay épocas en las que el olor a azufre me resultó insoportable, al punto de querer apurarme para hacer todo rápido y salir volando. Pero la segunda vez que fui… no fue tan tremendo. ¿Será que crecí? ¡Qué horror! 😄
La cuestión es que Rotorua es clave: no solo por su ubicación (cerca de Auckland y camino a Taupo), sino porque tiene un montón de actividades hermosas más allá de su famoso mundo geotermal. Vamos con una guía completita para descubrir todo lo que tiene para ofrecer:
🌡️ Actividades geotermales
Rotorua es famosa por su actividad geotermal: pozas humeantes, olor a azufre, barro burbujeante y colores imposibles.
En muchos parques públicos, calles y hasta en las cañerías que salen de las casas vas a ver (¡y oler!) la geotermia en acción. Pero si querés ver lo más impactante, ahí sí hay que invertir un poco. Acá te dejo un resumen de los lugares más conocidos:
Waimangu Volcanic Valley
No tengo referencias directas, pero es de los más nuevos y un poco más alejado. Parece tener caminatas más largas y hasta la opción de paseo en barco. Ideal si buscás una experiencia más en contacto con la naturaleza.
Wai-O-Tapu Thermal Wonderland
El más famoso (sí, el de las fotos con colores flasheros). Fui la primera vez que estuve en Rotorua y lo súper recomiendo si querés ver esos paisajes que parecen de otro planeta. Es turístico, pero vale la pena.
Whakarewarewa – The Living Maori Village
Tiene de todo todo en combo. No fuimos porque no me convencía cómo vendían la parte gastronómica comparada con otro lugar que probamos. Pero puede ser una buena opción si querés una experiencia completa en un solo lugar.
A esta sí fuimos, ¡y la recomiendo!
Tiene senderos entre zonas geotermales que vas recorriendo con un mapa que te explica por qué cada lugar se llama así. Un detalle que nadie te cuenta: hay una parte del recorrido que atraviesa un bosque precioso, que le da un respiro verde al paisaje humeante.
Es más tranquilo que Wai-O-Tapu, aunque con colores menos intensos.
Al final del recorrido te ofrecen una mini actividad de tallado en madera para crear tu propio souvenir. No es obligatorio, pero estuvo muy copado.
Lo mejor —y la razón por la que elegimos ir— fue el famoso baño de barro con aguas sulfurosas. Posta, una experiencia única (y que solo me animaría a hacer en Nueva Zelanda!).
👉 Más detalles sobre cómo fue, cómo alquilamos todo y mi súper plan para ducharnos antes de irnos están en @Emigranding_conFio o me podés escribir directo.
¿Por qué Rotorua es tan especial?
Rotorua está ubicada sobre una zona geotermal activa, parte del Cinturón de Fuego del Pacífico, donde la corteza terrestre es más delgada. Eso permite que el calor del interior de la Tierra suba hasta la superficie, dando lugar a pozas humeantes, barro burbujeante y aguas termales llenas de minerales.
Los maoríes, primeros habitantes de esta región, entendieron desde siempre que estas tierras tenían algo único. Sabían leer la naturaleza, y por eso enviaban a sus guerreros heridos a Rotorua: para sanar en las aguas calientes, cubrirse con barro medicinal y reconectar con el espíritu de la tierra.
🌿 Por eso Rotorua no solo se recorre: se vive, se honra y (si te dejás) también te sana un poquito el alma.
🌀 Experiencias culturales maoríes
Rotorua es uno de los mejores lugares para vivir una experiencia cultural maorí… o al menos, uno de los más abiertos al turismo para aprender sobre ella. Pero ojo: la cultura maorí está viva, no es una atracción. Si vas con atención, también podés aprender mucho observando, escuchando, y charlando con la gente local. Ahora sí, vamos a las experiencias turísticas recomendadas, que es lo que me compete en estas guías:
Mitai Māori Village: Tiene varias actividades distintas y sí, ¡hay que reservar con anticipación!
Yo me quedé con las ganas del tour nocturno, que parecía el más lindo de todos (estaba agotado) y que por las fotos se ve espectacular, con luces entre los árboles y un ambiente muy especial. Como no conseguimos lugar, fuimos al tour del mediodía con almuerzo… ¡y fue increíble!
Nos explicaron un montón sobre la cultura maorí, sus símbolos, el haka, las estructuras tradicionales, y también hubo un espectáculo precioso donde te contaban qué significaba cada canto y cada movimiento. Llegan en canoas, los trajes son hermosos, y la atención es súper cálida. La comida estaba riquísima. Y como dijimos ese día con varias personas: solo le faltaba un shop al final, ¡porque te querés llevar todo! 💛 Ese día me hice fan de la cultura maorí.
Datito: en el lugar podés ver la silver fern, esa hoja plateada y el símbolos de Nueva Zelanda.
Te Pā Tū (antes Tamaki Māori Village)
Es una de las experiencias más famosas. Incluye bienvenida ceremonial, caminata por el bosque, espectáculos culturales y cena tradicional —más o menos el combo que suelen ofrecer estos tours.
Creo que no elegimos esta por el precio o la disponibilidad (¡no me acuerdo bien!), pero por lo que se ve en la web parece increíble, y las fotos del bosque iluminado de noche son un sueño. ✨ Si alguien va, ¡cuéntenme por favor!
Whakarewarewa – The Living Māori Village
Es la que te contaba antes, donde se combina la actividad geotermal con la cultura maorí. Ofrecen el típico combo: visita guiada, historia, espectáculo cultural y comida tradicional.
Personalmente, no me habían convencido las fotos ni algunas reviews que leí en su momento, así que no la elegimos.
Pero igual creo que debe tener su valor, porque es una cultura hermosa y es clave aprender de ella si vas a viajar por Kiwiland.
🌲 Redwoods – Whakarewarewa Forest: el bosque de los gigantes
Los redwoods son de esos árboles que te impactan al toque. O sea, imaginate que una recomendación turística sea: “andá a ver árboles”... ¡y que valga totalmente la pena!
Son originarios de California, traídos como parte de un experimento forestal. Pueden vivir más de 2.000 años, crecer hasta 100 metros de altura, resistir fuego, moho, insectos… y hasta limpian el aire mejor que casi cualquier especie.
Caminar entre ellos, elijas la hora o el formato que elijas, es un flash. Te sentís más chiquito que un hobbit. Hay algo ahí, una quietud, como si el bosque te escuchara.
Nueva Zelanda confirma que sí, es definitivamente la Tierra Media, y Peter Jackson un genio. Ahí tienen que haber vivido elfos… y definitivamente me encantaría reencarnar en uno de ellos.
Nosotros hicimos el Treewalk nocturno (¿por qué me gustan tanto las luces de colores? ¡qué desgracia!). Pagamos entrada, había mucho turismo, costó estacionar y hacía frío (fuimos a fines de marzo). Peeero: fue hermoso igual. Caminar por pasarelas colgantes, con luces flotando entre los árboles gigantes, fue como entrar a un cuento.
Unos amigos fueron de día, ¡con el perro!, y sinceramente me pareció el mejor plan. Más tranquilo, sin apuro, podés ver los detalles del lugar, no pagar entrada, escuchar los sonidos del bosque y conectar con otra energía.
Eso sí: desde abajo, no desde las pasarelas, pero si te queda la manija, siempre podés hacer las dos.
🍴 Explorando los sabores de Rotorua
Te la vas a cruzar seguro, porque está en pleno centro y súper iluminada. Pero ojo con esto: como pasa en muchas partes de Nueva Zelanda (y otros países no latinos), la cena es temprano, así que no cometas el error que hicimos nosotros de hacer una actividad tarde y pensar que íbamos a cenar después. ¡Acá se va tempranito!
Se llama Eat Streat (sí, “eat” significa comer 😄) y es una calle peatonal semi-techada al final de Tutanekai Street, justo al lado del lago. Tiene un poco de todo: restaurantes, bares, cafeterías y opciones para distintos gustos y presupuestos.
Yo siempre recomiendo pedir unas kumara fries (papas de batata neozelandesa) con una birrita bien fría 🍠🍺
🧭 Explorando los alrededores
🧙♂️ Hobbiton
Solo recomendado si sos fan del Señor de los Anillos. Es un lugar hermoso y muy fotogénico, sí… pero es caro, y la verdad es que el tour estándar no es la gran cosa. Yo quería hacer los nuevos recorridos especiales (como el desayuno hobbit), pero parece que ni tres meses de anticipación alcanzan para conseguir lugar 😅
📝Hay tours más lindos (y menos turísticos) al sur del país.
🕳️ Cuevas con glowworms
Las cuevas de Waitomo son uno de los lugares más conocidos de la Isla Norte por sus famosos gusanos luminosos.
La experiencia es linda, pero también muy turística y bastante cara.
💡Hay otras que son gratuitas o mucho más tranquilas, pero también más difíciles de encontrar, y requieren más tiempo y logística. Si tenés auto y ganas de explorar, pueden ser una opción más auténtica.
🏖️ Mount Maunganui (Tauranga)
Es una playa preciosa con un pequeño monte (el "Mauao") que podés subir en una caminata ponele que fácil y con vistas espectaculares del océano Pacífico. La zona tiene ambiente costero relajado, surf, cafeterías lindas y un aire más playero.
📍 Se llega fácil en auto o bus desde Rotorua, o podés combinarlo si venís bajando desde la Península de Coromandel.